Día Mundial de los Enfermos
En las últimas décadas, nuestro país se ha coloca en los primeros
lugares a nivel munidial en algunos padecimientos de salud. De acuerdo con
datos de la Organización Mundial de la
Salud y el Instituto Nacional de
Estadística y Geografía (INEGI), las enfermedades que más afectan a los
mexicanos son la diabetes, la obesidad y la artritis reumatoide.
Josefina Ríos Robles, es una mujer de 77 años, originaria del municipio
de Jamay que ha padecido diabetes por más de la mitad de su vida, ella se
encuentra postrada en una cama y en constante medicación debido a su enfermedad,
ella es una de los más de seis millones de personas que sufren diabetes en México.
“Pues yo me
siento muy cansada, estoy entumida de mis manos de mis pies, me siento muy mal,
dios me va a dar licencia de que me va a aliviar que más, el es al que le pido
que me mande mi salud”.
Haciendo referencia al proverbio de No
hay mejor medicina que el amor, este 11 de febrero se celebra el día mundial del enfermo con la
finalidad de prevenir y de atender a las personas que se encuentran en alguna
situación de riesgo.
Margarita Cortes Godínez, originaria del municipio de Jamay, se dedicó a llevar la eucaristía católica a los enfermos durante
6 años, y actualmente pertenece al grupo del “Sagrado Corazón de Jesús” en el asilo del municipio.
Maestra por profesión, “Maguis”
como la conocen sus amigos, es una mujer cuya sonrisa levanta el ánimo al
instante, tal vez por eso optó por invertir sus tiempos libres en ayudar a
otros.
Maguis disfruta ayudar a los enfermos, platicar y convivir con ellos.
“Primero llego y les pregunto cómo se encuentran,
cómo están, en ocasiones es tanto su anhelo de estar ahí con ellos que con toda
la confianza nos cuentan sus penas sus gozos, y de alentarlos pues también nace
para comprenderlos y comprender la situación que hay en la familia y darles
palabras de consuelo”.
El estar conviviendo con personas enfermas podría hacer que los ánimos
decaigan, sin embargo Maguis comenta
que su alegría va aumentando ya que en la mayoría de los casos los enfermos
suelen recuperarse.
“Yo no he sentido dificultad por que hace uno un
espacio, de echar una carrerita y de estar ahí con ellos, voy cada ocho días a
veces cada quince o a veces día con día”.
Ayudar al prójimo es un trabajo que
considera Margarita sólo es
para aquellos que tienen fe y que confían en que las cosas mejoraran ya que no
existe paga más que la satisfacción de ver mejoría.
“Siento un gozo el mismo gozo que ellos sienten lo sienten uno y la
satisfacción de estar en ese momento y así también al contrario de que están
estables y los ve uno más grande y se
encomienda a dios o de regalar ese tiempo y ver la alegría con la que ellos
estaban esperando a nuestro señor, preparaban su altarcito, cantaban y es una
satisfacción ver como con gran gozo esperaban la eucaristía”.
Este día es celebrado desde 1992, cuando la iglesia católica encabezada por
Juan Pablo II organizó por primera vez las jornadas del enfermo y en este año
2014, se realizará la vigésima primera jornada.
Viviana Cervantes
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