viernes, 4 de julio de 2014

Incremento en la carne de cerdo afecta a clientes y comerciantes

Carniceros de Ocotlán aseguran que el incremento en el precio de la carne de puerco es un golpe al bolsillo, tanto del comerciante, como del consumidor; los productos congelados son la competencia a la que no le pueden hacer frente.

Ante el aumento en el precio de la carne de cerdo, los comerciantes de Ocotlán, dedicados a la venta de carne, manifestaron que el impacto económico no sólo afecta al consumidor, también al comerciante directo, ya que la elevación del costo no se mide  sólo en centavos.
imagen de archivo

Christian Flores, propietario de una carnicería en el mercado Juan Bravo y Juárez, expuso que el pasado mes de junio, el costo por kilo de un corte regular de carne de cerdo costaba alrededor de 75 pesos y que actualmente el mismo producto tiene un costo de 96 pesos.

“En vez de subir 20 o 30 centavos, el cerdo va subiendo por peso, uno cincuenta. Uno se pone a pensar, es un peso, no pasa nada, pero en cien kilos, una tonelada, son mil pesos, mil quinientos más. La misma gente, las amas de casa son las que empiezan a renegar, por qué el aumento del precio”.

Christian Flores explicó que debido a esto, la misma clientela ha optado por comprar carne congelada, y aunque la calidad es menor, los consumidores prefieren ahorrar. Refirió a que el problema principal es la escasez del mismo ganado porcino y como consecuencia los productos congelados se volvieron un mercado al cual no  le pueden hacer frente.

“El problema también con nosotros es que está entrando mucha carne congelada y son productos muy baratos, entonces no podemos competir también con ellos. Ya la gente, o el taquero, o el restaurantero, por ahorrarse esos diez pesos se va directamente a los productos congelados”.

El comerciante declaró que hace año y  medio la Unión de Porcicultores de Jalisco difundió la noticia de la diarrea porcina, lo que afectaría al mercado, pero esa información no se proporcionó en primera instancia de parte del organismo.


Edgar Gamiño

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