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| Foto: Martín Navarro. |
La iglesia católica en Ocotlán organizó la celebración de una eucaristía en la parroquia del Señor de la Misericordia en honor de quien fuera el obispo auxiliar emérito de Guadalajara, Rafael Martínez Sáinz, luego de su fallecimiento el pasado domingo 06 de noviembre en el hospital San Francisco de Asís en la capital del estado.
El arzobispo emérito de la arquidiócesis de León, José Guadalupe Martín Rabago, dio un mensaje durante la eucaristía en honor a Martínez Sáínz, donde señaló su carrera sacerdotal para los feligreses de Ocotlán:
“Los restos mortales de nuestro hermano Rafael, amigo y padre de la fe, han sido colocados en el altar y aquí los tenemos. Está cobijado por el Señor de la Misericordia, bajo cuya protección con fuerza y misterio durante los muchos años que desempeñó su misión sacerdotal en esta comunidad de Ocotlán, que fue la comunidad donde estuvo siempre”.
Durante la misa el arzobispo emérito aprovechó un lapso de tiempo para platicarles a los feligreses que se dieron cita, las anécdotas que vivió con del sacerdote para que la ciudadanía conociera un poco de lo que fue la vida del párroco. Martínez Sáinz prestó sus servicios a la Diócesis de Guadalajara durante un lapso de 57 años en diferentes cargos eclesiásticos como presbítero y obispo auxiliar para desempeñar su labor pastoral.
Antes de que los restos llegaran a la ciudad de Ocotlán, primero fue velado en el templo del Expiatorio de Guadalajara, luego hicieron un trayecto hacia el municipio de Tecualtitán durante un espacio de una hora y finalmente fue trasladado a la parroquia del Señor de la Misericordia para permanecer la noche del lunes 07 de noviembre y oficiar la eucaristía que dio paso a su sepulto.
Martín Navarro.
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